El hecho ocurrió el martes (19) cerca de las 19:00 horas, cuando la víctima fatal, Hugo Nelson Aguayo Nuñez, estaba llevando a su esposa, Elisa Pino (18 años menor que él) a un hospital luego que ésta le manifestara que se sentía tras haber ingerido tortilla en la casa de su suegro, según datos que maneja la Policía.

Según relatos, faltando pocos minutos para las 19:00 horas, la víctima salió a bordo de una camioneta llevando a su esposa que insistía no sentirse bien. Iban transitando por un camino vecinal de tierra, y al llegar a un lugar desolado, conocido como San Blas, luego de haber recorrido cerca de 3 kilómetros, la mujer le pidió a su marido que pare porque estaba con ganas de vomitar.

Al detener la marcha, la mujer descendió y en ese mismo instante aparecieron sujetos efectuando varios disparos de escopeta contra la ventanilla del lado del conductor quien falleció al instante y fue despojado de 2.500 euros y 10 millones de guaraníes de los cuales los delincuentes tenían conocimiento e incluso donde estaban guardados en lugares distintos.

Lo llamativo del hecho, y lo que hace sospechar de su complicidad, fue que la ahora viuda, dijo no haber escuchado ni visto nada, además de la “coincidencia” de que ella justo hizo que su esposo detuviera el vehículo en el lugar donde se encontraban aguardando a que llegaran, ya que e el lugar se encontraron latitas de cerveza.

Las evidencias son bastante claras, pero es la Policía la que tendrá a su cargo aclarar el caso. Mientras tanto, los familiares de Hugo Nelson Aguayo Nuñez, acusan de complicidad a Elisa Piño, quien pidió custodia policial para ir al velatorio de su esposo en la casa de sus suegros.

Foto: Abc TV

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