En menos de quince días, la Cámara Alta cambió totalmente de postura al revivir y aprobar el proyecto de ley que crea “el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles en la República del Paraguay (Fondecpy) y establece medidas transitorias de contingencia para la importación del gasoil tipo lll y de la nafta virgen, y deroga la Ley N° 6900”.

Esta normativa es la que en principio estaba en el debate y fue presentada por el Ministerio de Hacienda con apoyo de emblemas privados, pero luego se optó por la Ley 6900, que estableció solo el subsidio para la estatal Petropar del gasoil común y la nafta de 93 octanos.

El proyecto podría recibir sanción hoy en Diputados, a través de la convocatoria a una sesión extraordinaria, tal como lo hizo la Cámara de Senadores. En la práctica, la iniciativa legal lo que hace es extender también a los emblemas privados el subsidio, pero que los legisladores sostienen que será para los consumidores finales.

Se hará a través de la creación del Fondecpy, que se nutrirá con recursos de un empréstito de hasta 100 millones de dólares. Precisamente este es uno de los aspectos por los cuales había sido rechazado. Asimismo, establece un fideicomiso de administración y fuente de pago para la estabilización de los precios derivados del petróleo.

El senador colorado Juan Darío Monges confesó que este proyecto surge a partir de la inquietud del sector privado, de que se hacía insostenible mantener el 86% de abastecimiento con los precios de Petropar, que es subsidiado con la Ley 6900.

Indicó que pidieron la recomendación del Ministerio de Hacienda y se determinó volver al proyecto de creación del Fondecpy.

Durante el debate, los senadores Rodolfo Friedmann, Abel González y Fernándo Silva Facetti coincidieron en que si bien esta ley no es una gran solución, es la mejor salida, debido a que la vigente solo está sirviendo a un porcentaje menor de operadores y no todos los consumidores pueden acceder porque Petropar solo tiene el 14% del mercado.

CENTRALES. En cuanto a los puntos centrales del proyecto, el senador Monges refirió que establece que las compensaciones se harán con base en la estructura de costos de Petropar. Dijo que esta es una de las diferencias con el proyecto original, que establece que el cálculo del costo total de importación y precio de facturación de mercado serán determinados por el Ejecutivo, tomando como base referencial la estructura de costo de Petropar.

Igualmente, destacó la constitución del fideicomiso para estabilizar los precios, a través del Ministerio de Hacienda y la Agencia Financiera de Desarrollo como agente fiduciario.

Subrayó que, adicionalmente, el patrimonio del fideicomiso, aparte del crédito, podrá incrementarse adicionalmente con otros recursos y fuentes de financiamiento debidamente respaldado por leyes.

La normativa aprobada también dispone que el Ministerio de Industria y Comercio es el que deberá remitir a la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) el registro de los potenciales beneficiarios (importadores) que desean acogerse al beneficio.

Por otra parte, en principio, una vez que sea puesta en vigencia la nueva ley, los emblemas tendrán que bajar los precios de la nafta 93 y el diésel común al precio que actualmente comercializa Petropar y el subsidio por cada litro estaría en el orden de los G. 2.500 y 1.800 guaraníes, según los datos de marzo.

Panorama de crisis social

Según confesó ayer el senador colorado Juan Darío Monges, el sector privado pintó un panorama sombrío para el mercado en materia de crisis y posible desabastecimiento.

Mencionó, en este orden, que la escasa venta, como consecuencia de no poder vender al precio de Petropar, estaría generando problemas de reposición y de crisis social debido a que ya no podían mantener más a dos mil trabajadores.

Refirió que también señalaron que ya hubo muchos despidos y hay emblemas que podrían salir del mercado, especialmente de estaciones de servicio que son tomadores de servicio que están amenazados en su flujo de caja por la baja venta.

Monges señaló que el presidente de Petropar, Denis Lichi, les manifestó que era imposible que pueda satisfacer la brecha del mercado que no estaba al alcance y que aún duplicando llegaría solo al 28%.

Por otra parte, también trascendió que el vicepresidente Hugo Velázquez fue uno de los que hicieron lobby para la aprobación del proyecto.